Ocean Riviera Paradise, Riviera Maya

Gustavo y Rodolfo del equipo de experiencias hicieron nuestro viaje muy divertido y ameno con sus actividades y su humor. Les agradecemos por todo yo y mi familia. De Sinaloa para el mundo.

Tegmo la costumbre de hacer investigaciones exhaustivas acerca de los hoteles en los que me gustaría hospedarme y después de comparar muchos de ellos, este resort quedó seleccionado para mis vacaciones. En primer lugar, este resort tiene un precio muy atractivo. No es de los más baratos de Playa del Carmen, pero después de comparar, valió la pena gastar un poco más para hospedarme en este lugar. Yo jamás juzgo un resort por su lobby (ya que es el lugar en donde menos tiempo paso) pero este lobby es agradable, tiene aire acondicionado y es espacioso. El proceso de llegada fue muy fácil y rápido, estaba haciendo cola y uno de los concierges de privilege se me acercó y me ofreció hacer check-in en su escritorio, lo cual me pareció algo muy eficiente. La explicación acerca de las reglas del hotel fue completa, pero la explicación acerca de lo que incluía mi estancia, que restaurantes, amenidades y a que áreas tenía acceso fue simplemente inexistente, así que tuve que regresar al lobby un par de veces para informarme. Solicité que me pusieran en un edificio que no estuviera frente a la alberca de niños, pero al parecer esto no era posible, no obstante me dieron una habitación alejada lo cual se agradece, aún cuando el siguiente concierge (me atendieron dos) no me explicó como llegar a mi habitación y en un hotel tan grande, eso es muy necesario. El hotel solo cuenta con un restaurante buffet, que es muy bueno. La comida tiene un muy buen sabor, se nota que aún cuando le gerencia corta esquinas con algunos ingredientes, los empleados tratan de cocinar lo mejor que pueden con lo que tienen y se agradece. El buffet tiene opciones vegetarianas, secciones de diversas cocinas del mundo y a mi esposa le encantó que tuvieran una sección asiática con edamames, ponzu y diversas salsa de soya. Los chefs que están en la isla de carnes son MUY amables y serviciales, listos para cualquier capricho. En este sentido, me encantó que casi TODO lo que pedí que fuera a mi gusto me lo concedieron, solamente en una ocasión el bartender se negó a ponerle limón y sal a una cerveza porque "los cocktails se acaban a las 5 PM y eso es un cocktail" y pues no puedo juzgarlo por seguir las reglas que le ponen, es solo un mesero. Fuera de eso, todos fueron muy atentos y serviciales. Creo que uno de los puntos débiles de este hotel es sin duda los restaurantes a la carta. Debido que solo fui por el fin de semana, tenía derecho a solo una reservación y como llegué a las 11:00 AM, ya no pude reservar para ese mismo día. Tuve que levantarme a las 8:00 AM del día siguiente para poder reservar el UNICO restaurante que la aplicación me permitió, que fue el STEAK HOUSE (el cual era el último que me hubiera gustado reservar) el bluemoon no estaba disponible en la app y nadie me explicó porqué, el italiano no abría ese día y para reservar en el asiático había que luchar hasta la muerte con espadas samurai en una arena bajo el sol, por lo cual no tuve opción. De nuevo, los empleados fueron amables y me hiciern platos a mi gusto, pero la tabla de carnes fue exactamente igual a la que servían en el buffet (salvo por un pedazo de arrachera) y la sopa de papa y poro, si bien estaba deliciosa, tenía los mismos ingredientes que en el buffet. Me esperaba algo especial; Definitivamente deberían de diseñar mejor esta experiencia de los restaurantes a la carta, porque a mí me pareció mala, demasiado limitada y sin chiste. Por otro lado, mi esposa me obligó a ir a la media noche a route 66 y las hamburguesas, dedos de queso y papas a la francesa estaban muy buenas! El unico problema es que solo había un mesero y como no usa comanda y se trata de aprender las ordenes de memoria, este se confundió y le llevó mi orden a otra mesa, por lo que los otros comensales me la llevaron. Otro pequeño error atribuible a la gerencia y sus pobres métodos, ya que el mesero estaba apenado y para mí no fué gran problema. Las albercas muy limpias, el agua olía muy bien y las instalacione en general estaban en buen estado, las habitaciones son sorprendentemente espaciosas y bien mantenidas a pesar de que no son nuevas y se nota que ya tienen algo de tiempo. La cama y el sofá muy suaves, el AC muy helado y la caja de seguridad funcionando. Los baños contaban con todo lo necesario y una buena cantidad de toallas. La alberca de la playa super bonita, en el mar había algo de sargazo (que limpiaban en la mañana) y aunque básicamente el hotel no tiene playa debido a la erosión, algunas personas se bañaban en el mar y había salvavidas. Algo genial de este hotel es que si vas en automovil, cerca hay OXXO, lavandería y demás servicios, que son considerablememte mas bartatos en el mismo hotel. Otra cosa sobresalientre es que te sirven una buena variedad de bebidas de marcas reconocidas y sus mixers son buenos también, incluso le enseñé a los bartenders como preparar un par de cocktails que me gustan y al día siguiente se acordaban de mis recetas y me las preparaban tal cual. Definitivamente la mejor amenidad de este lugar es MIKES COFEE. Me pasé mucho rato ahí, disfrutando de café, té, galletas y postres. El sabor de las bebidas era inmejorable, la atención amable y el lugar espacioso y con aire acondicionado. En resumen, este hotel es el mejor de la categoría "económica" de playa del carmen, sin sacrificar calidad de instalaciones, comidas y bebidas. Definitivamente voy a regresar en un futuro ya que valió la pena gastar un poco más en comparación con opciones como el bluebay y sus tragos horribles... definitivamente recomiendo este resort si no quieres gastar demasiado y no eres exigente.

Excelente en especial en el restaurante pez vela donde nos atendieron Rosemberg y nicte, buena comida pero en especial la atención

Han sido unas vacaciones inolvidables. Todo estaba perfecto, las habitaciones, la comida, las piscinas, la zona de playa, el personal siempre muy atento. Y una mención especial a Hugo, que hizo nuestra estancia fuera excepcional. Sin duda vamos a repetir.